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La idea es hacer una sintesis, sobre las distintas disciplinas en las que me he formado (gestalt, psicodrama, zen, relaciones humanas, arte).

Estoy convencida que mirar el mundo y la realidad desde esta perspectiva es vital para vivir presente en nuestro aqui y ahora...con todo lo que trae, que seguramente es mucho.
Las posibilidades se amplian, la creatividad surge y nuestra cotideaneidad pasa a ser una aventura que vale la pena vivir.

Te ofrezco la posibilidad de participar de las distintas actividades. Si es de tu interés contactate conmigo vía mail o teléfono.

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jueves, 19 de julio de 2012

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El eterno femenino

Comparto con Uds. este interesante texto, para que reflexionemos juntos sobre el eterno femenino y nuestra manera de estar en el mundo. Que lo disfruten! Autor: Eli Flores Siles – Terapeuta Gestalt y Corporal Integrativa Hablar de Lo Femenino es hablar del aspecto femenino que hay en hombres y mujeres, y que es inseparable del aspecto masculino existente también en toda la Creación. Es necesario integrar ambos aspectos, femenino y masculino, para llegar a convertirnos en seres completos y creativos. Los hombres tienen una mayor desconexión de Lo Femenino, ya que se les amputa en la infancia: primero con la separación de la madre, a la que no se pueden parecer, y luego en la guardería, donde el niño se encuentra con que la maestra gratifica la cooperación, el orden y la limpieza, mientras que en el patio necesita demostrar su “hombría” para ser aceptado por sus pares. Aprende así a nadar entre dos aguas, la escuela y el patio, y puede ser que fracase en una de ellas. Pero a las mujeres tampoco les ha ido mejor, ya que se han tenido que masculinizar para entrar en el mundo del trabajo, gobernado por hombres. La mujer ha ganado fuerza y capacidad para moverse dentro del Patriarcado, pero a costa de perder sus valores femeninos. El mundo patriarcal le ha enseñado a primar la consecución de objetivos, la competitividad y la acción sobre la receptividad, el pararse y la comprensión. Arquetípicamente, las mujeres son la Tierra, la Madre; y los hombres son el Cielo, el Padre. Pero algunos hombres no están poniendo la ley, y las mujeres tienen que ponerla a costa de su energía femenina. Hombres y mujeres hemos perdido los papeles y la humanidad está necesitando recuperar los aspectos femeninos. Hay demasiado Cielo y poca Tierra, demasiada Ley y poco Corazón. Cielo y Tierra tienen que estar conectados y equilibrados. El corazón es el órgano que conecta Cielo y Tierra. Cerramos nuestro corazón cuando ha habido una decepción y lo volvemos a abrir cuando hay confianza. Cuando nos abrazamos, nos abrimos el corazón unos a otros. Es el corazón el que nos permite la energía del grupo. Lo Femenino es esa energía vinculante que nos incluye a todos, que nos contiene a todos. Hoy vivimos en un mundo demasiado frío y deshumanizado, donde las nuevas drogas son tecnológicas. Vivimos “colgados” de Internet y de las redes sociales, escapando de nosotros mismos por no sentir el dolor de la existencia, y así perdemos las raíces, perdemos la Tierra. Cocinar, educar, la creatividad, el arte, cultivar la tierra, abren el corazón porque se emplean las manos. Comer, hacer el amor, enojarse (por eso los niños nos hacen enojar, para hacernos bajar)… todo ello nos ayuda a enraizarnos, a estar presentes. Enraizarnos también es vincularnos y crear vínculos es Femenino. Lo Femenino también es intimidad. La intimidad es permitir que el otro entre en ti, que te vea como te ves tú mismo. Invitar al otro al núcleo más profundo de tu ser. Pero uno no es lo suficientemente audaz y valeroso para abrirse, para mostrar el propio caos interno y mostrarse vulnerable. El otro podría explotarlo, este es el miedo. Lo Femenino es compromiso y es entrega. ¿Por qué le tememos al compromiso, a la entrega? Porque alguna vez entregamos nuestro corazón y nos hirieron. Porque tememos que el otro nos pida demasiado, nos absorba. Pero ese temor es nuevamente porque nos falta conexión con la Madre Tierra, con nuestra madre interna. Cuando estamos enraizados, cuando estamos presentes, no tememos que nos absorban porque sabemos poner límites allí donde necesitamos ponerlos. Cuando estamos presentes, Padre y Madre internos, Cielo y Tierra, están conectados. Y entonces somos capaces de responsabilizarnos de nosotros mismos y de arriesgarnos a sacar nuestro mejor talento, tanto si gusta como si no. Necesitamos abandonar la zona de confort, exponernos, para saber de lo que somos capaces. Para el Eterno Femenino –que también es el Inconsciente Colectivo– la vida es un juego cuántico, pero para que funcione hemos de aprender a jugar sin finalidad. Jugar con absoluto interés, pero manteniendo la capacidad de No Apegarnos y de abandonar expectativas e ilusiones. Disfrutar del momento mientras esté allí y cuando el momento empieza a desaparecer, ya que todo está destinado a desaparecer, dejarlo ir y saber agradecer la experiencia. El Eterno Femenino nos enseña a Fluir y a Aceptar la vida como es. Y esa es la clave para que la vida se vuelva creativa.